JORDANIA:
Ha maravillado a sus visitantes durante siglos con su Patrimonio Mundial, sus pueblos afables y sus evocadores paisajes de desierto. Con lugares turísticos que no se querrán perder, Petra, una maravilla del mundo, El desierto de Lawrence, las ruinas romanas y muchas más.
ISRAEL:
Cuna del judaísmo y la cristiandad, y sagrada para musulmanes y bahaíes, Tierra Santa invita a sumergirse en la riqueza y la variedad de sus tradiciones religiosas. Entre los lugares históricos judíos están el Muro de las Lamentaciones de Jerusalén y las suntuosas sinagogas bizantinas.
EGIPTO
Egipto recibe al viajero con el imponente Nilo y magníficos monumentos, con su cautivador desierto y su frondoso delta, con su gran pasado y su acogedora gente, amante de las historias. Tumbas llenas de arena, pirámides austeras y enormes templos faraónicos. Egipto despierta al explorador que todos llevamos dentro. Destacan el Valle de los Reyes en Luxor, donde se halló la tumba de Tutankamón, y los brillantes hallazgos del Museo Egipcio de El Cairo; viajar en barco por el Nilo a Dendera, Edfu o alguno de los otros templos ribereños; cruzar el lago Nasser y admirar la obra maestra de Ramsés II en Abu Simbel o ir de excursión al desierto a visitar ruinas romanas.
Conoce estos destinos en un solo viaje y vive le experiencia de Tierra Santa.